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Show 32 dolo, llegc.trse :1 lo!:! 0 p~tuoles y de amparallos a ellos, aunq u~ siempt:e e tuv icrou ucutro , que uo se osa.bau del todo declarar por enemtgos de los me.·ic[tno ·, ni por vcrdaderos amigo del Marques, dado .que le servfan Y dabau todo el provcimiento que lw.hfa. men ester y le haC1an grandes zale-mas y regocijo ·. Cuaudo llfo nte~uma, upo que el Marques estaba en Ooyoacan 1 apare-j6 uu gntn<le y solemn recivimieuLo para serville en Ia ciudad, mandando a tOUOI-J SU · ca.b~Lll l'OS se halJaSCU a] re ibimieuto Y a todos los gran< les de su ·ot'Le y de l:t · dcm{ts ciuda.tlcs comarcanas; pero el Marques, como hom bro. :sag{L~ y mafioso, proem aba, pri mcro que saliesc 2 de estos pueblos oT::tnde donde llegc.tba csLan;e algunos dias <le cansando y atrayemlo a los indio · y a.lag{tuJolo · y hacieudoles muclta caricias Y mostdi.•~Jolc mueho :uuor y amonest{mdole. y pers ua.dit~udol es fucsen sus amlgos, pucs el 110 venb. {t IJ acel les mal ni dafio, sino a libmllos de l.as tiranias y oprcs ioucs eu que cl rey Monte~uma lo · tcu1a, promettendoles grandcs lil>ertadcs de Ja servidmnure en que estab~u; el cual, despnes q~e le parecia qnc ya. 0sta.ba.n bieu persuaditlos, aperml>fa su geute para sabr de a.lli y p~tsar adclaute, y s~tb i e ntlo que la ciudnd. de Mexico ~staba tan cerca cuvi6 [t avisar al rey ]}fonte~uma, como el estaua alll y que qnerfa. ir a ellc; quo que em lo que maudaba. El rey recibi6 muy bien a los m •n ·ageros y mautl6 le dieseu al Ma.rqu s l!Ue aquella era de su ca a y qnc 61 esiaha ya esperaudo eou dcsco de vclle; que viniese mucbo de nombueua cua.ndo maudase, que solo le l>esaba de qu~ viniese acompauado do los t.la.xcaltccas sus eucm igos y los mcticsc en su j urisdiccion y en sn ciudad, por qne nw sus morta.les encmigos, y que de ello sn geute se lla.bfa alvorotado y recibido p sadurnbre y t.omor de que en sn ciudad no ·uciede c ~tlgun all>oroto con los thtxcalteca, por ser como eran su.· mori~tles eucmigos. El Marques respontli6 que uo tr:iya el gente de guerra com;igo uinguna, iuo solo geutc de carga que le traia surepnesto y la.s C<trgas de sus soldados y los pr seotcs do mantas y otras riquezas con que le alJbn recibido en los puelJlos doude abia llegado, las cuales eran tauta.s y tc.tu ricas y de tantas labores, asi aderezos y mautas para hombres como ade rezos de mugercs muy ricos y galanos, qne en aquello solo traya ocnpauos y cargados mncho numero de Indios para en Mexico rcparLillo {t sus sol<lados y gcnte, como lo rcpartio, aunque por mal de algunos; qne con ht codicia de llevallo, cuaudo de Mexico salieron huyendo, lo wataroo y perdieron alii 1:1 vida y lo demas y quiza (y sin quiza) el alma, pam i·n eternwrn. 1 .Lon8e "Cnlhunoan.'' 2 Esto oR;-"unto~ de salil'." CAPITULO I.JXXIIII.1 De c6mo el Marques dol Valle fu6 recibido en M6xico do Montezuma y do sus grandos con mocha soloumidnd y contouto y nposoutado on las casa realos de Ia. oiudad y muy bien servidos y de lo. prisiou dol roy Montezuma. . Jamas fue mi intento ni voluntad, ni ahora lo es, de escribit' ni haeer nneva bistoria de la venida de los espaiioles a csta tierra, ni de sus hechos y haze:tfias, tan atrevidos y her6icos, ni de poneUos. en la cum bre y alabanza que mereeen, pucs fneron cierto dinos de eterna memoria, salidos de pechos y corazon mas que humario, cou que el animo espaiiol siempre a sido engmndecido y alavado y nombrado en todo el mumlo, para emprender semejantcs cosas y tan atrevidas, como fue la que vamos tratando; y como digo, no siendo mi iutento trata.r de sus grandezas ni hazafias, ni traer de nneyo a Ja memoria como cl M~trqnes del Valle entr6 en el puerto y barren6 los navfos por quitar {t sn gente la esperanza de volver, ·y para que visto el poco remedio que cle su vuelta tenian vendiesen Rus vidas, como esfor,r,ados, ni tratar de como estnvicron determiuados de lc matar, ni de las humildades y palalJras con que se csous6, porqne ya todo esto esta ya muy sabiclo y escrito por muchos aHtores. Demas de esta razon ser1a, abiendo de escribir verclad, y segun Ia rel: tciou y memoriales de los indios, entre mnchos bienes y ltechos her6icos, me forzaria la rni ·ma historia :'t escdbir grandes y atroces crueldades y inllumanidades de gra~ lastima y rlolor qne se executaron y hicieron, con que quiza ofenderia y darla desgnsto {t los qne deseo servir y dar contento con la presente lectura; las cnales ann en este camino, antes de llegar a Mexico se executaron, que aunque pasando por elias como de paso, las e callado, especialmente una que eu la ciudad de Ohollula se oometi6, de 1 Lam. 29, Pto. 1~ DunaN.-ToM. u. '5 .. |
