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Show 48 ccgu dad ~ idolatrla en qu estalmn, acndi6 como piadoso padre al socorro quo ol bucu Marque del Valle lo p dfa y a los dcm{t que de comzon se 1 pcdlan, p cialm ntc a ln. b udita intcrcesora y rnadre de pec..1.dore~ Y aooO'ada ltucstra, 1a. Reina do lo ngeles y S fiora ue nuest.ro remcut<>, {t qui n 1 bncn Oapitan: p dfa rcmedio y fa,vor, la cnal aeuclio como ver< lad era r mcdiadom d ' uuc tms afiicioncs. Oomlc por suint rcesion aplaca<lo 1m stro Dios, cnvio aquclla noche, en t,i mpo de ln. mayor ltccesitlacl, till aguaccro tan grande y con uua tempc.' L:.Hl ac ~tir y granizo, quo forzados los moxicanos {\, dexar ol cerco Y apao·atlaA b s lnmbr s qu la centiuelas y guardas t uf~tu, todos o rec~giC' ron y 11 ny 1'011 :t la u n (t sn · a as y a posen t;o , lmycndo d~ I a ternhi t ~1111) • ·tad; lo nrtl vi ·to por el J\'brq 1 s del Ya.llc, 'ntcudwndo ser v uido por la volun tacl d •lmuy alto y piado o Seiior y de tra. Sefiora do los Hemeclios, (t·qui ett 61 c n omendaba, maud6 luego que con todo Hil \ll ·io y ·in struendO 11i rnido, t odOS alie 1l ll1 tlJ CU Ol'dCU pOl' doudo los t ln.x •alLe 'a lo gni rLF' n y otro. Indios que teni'au presos de lo amigos, los •tml s Yioudo 1::t op rLunitlad d 1 t i •mpo y o cmidatl tle la noehe y que toda. vl:t 1 ao·na lcf-l cnt f<wor< bl , qno no ceRrLba de lloY r, cmpczarou a ali r, m and ~mdo el Mnrqu ' · qu uinguuo carga o d I tc '01'0 1 ui se acouiciase {L l1 \'ar oro ni joyas ni otra cosa, que le fuero cstorvo {L su camino y huida, porqtte uab~'L por perdido al que a.rgas de aqu •lias riqueza qne alii abfa y to oro; ·iuo qu lo dex:nscn que alii se esta.rfa vam cuando Yolvic en; quo Io <rue 1 i\.COU ej ~tba. era que llevasen todo cl pan que putliesen basta n,lir d l o.· t ~ rmin o,. d Io · encmigo , y que esto los erfa de mas proYecllo, que no el oro ni riqneza que po<lbn Ilevar. Oon c to empez6 el Marqn ,. {t alir muy ·ccrctamente y cou runcho 6nl u y ·ilcn ·io, ignicndolo su oldados, todos los que tomaron lm con-lUO, cargados d pan y matalotnjo, y asi los que no lo tomaron quedaron cargaudo de aqn 1 oro y joy<ts que alH abia, at rcri6ndose 2 {t quo llevabau mncllos de ellos caballo , y a 1 cargaron un mumlu de aquel tcsoro que alll abia muclJOs 1udios y india., y ellos rnesmos ioau cargados de todo lo que pullieron; los cualc , como empezaron a salir de los aposontos donde estabn.n, cou aquelln. carga de oro, no lo puuiorou baccr t:to secretamcute qu no fn ·eu s •nt idos de un imlio, que aca o sali6 a nua azotea, juntameutc con una iudia, los cualcs empezaron {t dar voces y {L dceir, "sali moxicano · que e os van c tos traidores; sali que se van cstos traidores;" 1 Lo contrnrio tlico Oortos on au cnrtn 2~ , li 43; quo ordooo u sus aoldudos llova~eu toclo el oro quo pudiomn. J,o mismo di ce Bern r1L Diaz. 2 QuizU. - "ateni6ndoso." 49 las cuales voces oidas salierou los mcxicanos y toda Ja gente de guerra que abla en la ciudad Y LA que de las demas provincias abian vonido, y dando gran alarido, que bastaba a turbar los eorazones muy apercibidos, cuanto, mas los desapercibidos 'y vacios de arm as y cargados de oro, fue tanta la turbacion que toma.ron, que volviendo muehos de cllos huyendo a los aposeutos, de donde abfan alido, se quisieron tornar {~ bacer fuer ... tes en ellos y otros que abiendo ya pasado algunas puentes, no pudiendo volver por ballarllas alzadas, dicron sobre ellos los indios con tanta furfa y rabia, que asi a los que ' alcanzaron fuera, como a los que se bicieron fuertes en los aposentos, los mataron a todos, sin quedar ninguno de ellos a vida, donde perdi6 el Marques del Valle setocientos hombres, a quienes los indios bicieron pedazos, sin ningnna piedad, quedando aquellas acequias llcna de hombres muertos y de caballos y de indios y fudias, quo uo ten ian m'imcro, y llenas del oro y joyas, que aqucllos mal aventurados abfan carga,do, y de mantas plumas y de todo genero de riquezas. El Marques del Valle con seisciontos bombros, puosto ya en salvo, y abiendo ya pasado las puentes todos con la priesa que e di6, orden6 su gente asi de fndios como do espaiioles, todos los que lo ablan quedado, siguh~ndolos los indios con mucha vocerfa, dandoles gran baterfa de piedras y flechas y dardos, se fum·on poco a poco, muy en 6rden, retirando a un Iugar qne agora llaman Ntra. eiiora de los Remodio. , donde llegaron los espafioles tan cansados y a.fligidos y tan mal t ratados, que muchos de ellos abiendo dejado los zapatos en el camino, llev:tban los pies, por ol suclo corriendo sangre, y otros las cabezas dcscnbiertas y al sol y otros muy mal heridos ue las piedras y varas que les aofan arrojado los enemigos. Vi ndo el Marques del Valle la mucha g nte quo lo faltaba~ tenicndo mucho dolor y lastima de ellos, estuvo por volver para ver si ics pNHa dar alguu remedio a los que ballaso vivos, poro saoiendo como a todos Io~ abfan muerto, sin podcrl::ie valor, aunqno quieren decir, y asflo cuenta esta bistoria, que los qno se recogieron {~los aposcntos que se defcndieron algunos dias y so ma.u tu vieron valcrosamellto contra los indios, pero que al fin y al cabo faltandoles eu todo el parecer y con ·ejo y lo principal, que era ol animoso capita.n, vinieron a morir a mauos de los indios y plega aDios que no fuesen los que fuet·ou de pareecr que matasen a los Seilores y que por sn cousejo se ej ccutase aquella cruelda<l, y que los co~ gasc Dios para que pa.gasen ileclto tan malo y atroz. Huidos los espn.iioles de Mexico y rouertos todos los quo cojieron, dice esta bistoria. que entrarou los mexicanos a los aposentos a buscn.r a su Rey Montczunu~ para egecutar eu el no menos crueldades ~tte en los cspafioles abian egecutado, y que andandole {L busonr por los aposentos le ha- DuRAN.- ToM. rr. 7 |