OCR Text |
Show 86 caban un lugar de retiro, emprendiesen navegaciones para predicar su fe; mas natural hubiera sido que tnttasen de convertir a sus vecinos los skrrolings, a la raza primitiva, monosilabica, acaso los esquimales; y se ve por· las traclicioues que no se ocuparou de eso. Aclernas, el argnmento de comparaciou de fechas no pucdc contestarse. En esto se confunde tambien al per onajc hist6rico con cl mito astron6mico. llemos visto que como clesaparec1a la estrella de Ja tarde por el Occidentc en cuyo rumbo estaba Tlap{tllan, decian que Quetzalcoatl {t su muerte se llabfa ido para alia: pnes de la misma manera, como Ouextlau estaba al Oriente de T6llan, y eu cse rnmbo nac1::t la estrella de la mafiana, decian que por alli babb venido Quetza.lcoatl. En cnanto al hombre blanco y barba.do, deLemos decir que ta.mbien de los tolteca se dice que eran bhtncos y barbados. Las razas inferiorcs con que se encontraron, cllos pueblos del Norte y por lo mismo m{ts desarrollados y nu1.s hcrmosos, debieron tomar como tipo de belleza su color mcis claro y su mayor abuudancia de barba, y atribuir estas particularidades a todos los persouajes para ellos superiores. Nadie sostendra que Ifnit~'ilopochtli era un europeo; y sin embargo lo figurabau tam bien con barba. Sc ve, pucs, que el color y la barba no son una prueba. En cuanto al traje ta.lar sembrado de cruces, no pudo ser el de los papas que era blanco pcro sin cruces. La historia no nos cuenta que algun pueblo 6 sacerdocio cristiano usara ese traje. Ademas, desconflo del relato de Torqucmada: no encuentro a Quetzalcoatl con esc traje en los geroglificos. Eu el c6dice Vaticano esta en medio de las nubes rosadas de Ia aurora como estrell[L de la manana; esta desnudo, llevando solamente un maxtli 6 cefiidor, y a la espalda un lienzo angosto con clos cruces, cuyos cuatro brazos son de igual tarnafio: en otro gcroglffi.co, esta enteramente desnudo, y las dos cruces estan en su tocado. ~lgunas veces se le representa con una especie de mitm; pero la mitra era muy antigun. en Ia civilizacion del Sur, como puede verse en clrelieve de la cruz del Palenque. Si se observa la leyenda genuina y primitiva, se vera que en ella nacla se dice re pecto a que Quetzalcoatl introdujese el culto de la cruz: en las· mismas profecias se habla de que Quetzalcoatl volverfa por el Oriente, pero sin hacer ninguua referencia ft la cruz. Los autores de seguuda rnano, sin ducla por haber· visto las dos cruces en el gerogllfico de Quetzalcoc~ tl y para explicar el culto de la crnz entre los autiguos indios, fu01·on los que introduj eron la idea de que el fne el que trajo dicha adoracion, sacando de aqu1 un argumento en favor de la preteudida predicacion del E,·angclio. La verdad es que era diflcil la explicaciou de las clos cruces de Qtwt~alcoatl, y no llabrfa dado en ella si no me hubiese fijado {tltimamentc en uno cle los m{ts preciosos idolos que tienc el Mnseo de Mexico. 87 Es una ca.beza colosal de serpentina, admirablemente pulicla y labrada. Que se refiere al calendario no me cabe duda, pues los glifos y cintas que tiene en el tocado lo demuestran, as1 como las conchas con sus divisiones en uu todo sernejantes a otras que tiene un monumento de la cuenta del tiempo, tam bien de serpentina, que es de mi propiedad. Tiene la cabeza las orejeras en forma de disco, que seven siempre en la cara del sol, y de ellas salen dos rayos, de las dos distintas figuras qne tienen los de la Piedra del Sol. El bezote que le cuelga de la nariz, es en un todo semejante a las orejeras, y forma la lengua de luz del astro. Eo los carrillos tiene tambien <los adornos triples, que en su parte superior consisten en dos discos, dentro de los cnales hay dos cmces de brazos iguales, las que no cabe ducla de que representan el Nalmi Ollin, pues tienen entre sus aspas cuatro puntos. Como el Nahui Ollin, representa, las cuatro posiciones del sol en el auo, es decir, el curso solar completo, ya se viene claramcnte en conocimiento de lo que representan las dos cruces del geroglffico de Q1tetzalcoatl, y aun las de la cabeza del Museo. Una cruz es un curso del astro; pero Quetzc~lcoatl, como estrella de la tarde, ticne un curso de 260 elias 6 un afio religioso de los nahoas, y como estrella de la mafiana tiene otro cm·so de 260 elias u otro afio del Tonc~lam~atl, y por eso es el ponerle dos cruces. Seve, pues, que Quetzalcoatl no introclujo el culto de la cruz cristiana. Las cruces que se encontraron, sabemos ya que eran el dios cle las llt~t,ias 6 el arbol del sol, scguo que pertenecfan ala civilizacion del Sur 6 del Norte; mas nunca un simbolo de redencion ni la cruz del Orucifijo. El Quetzalcoatl cristiano, como leyenda, cs un tipo admirable; 1 pero la histori a no puede admitirlo. Qnetzalcoatl no era mas que un sacerdote nahoa, reformador de la religion y fundaclor de una secta numerosa. Fue un gran pontlfice y un gran rey. Si una religion se exagera, y mas si en ella comienzan los sacrifi.cios babaros a que el pueblo no esta aun acostumbrado, viene naturalmente la reforma. Frente al terrible culto de Tezcatlipoca debi6 parecer clnlcfsimo el de Quetzc~lcoatl, que conservaba su candor primitive. La estrella de la tarde, desapareciendo amorosa tras el sol, y ellacero de la manana perdiendose entre las nubes de oro de la aurora, cuando todo es regocijo yalegrfa en la naturaleza, no podian inspirar pensamientos lugubres. La referrna quiso naturalmente traer al poder al sacerdocio de Quetzalcoatl, para oponerlo al terrible culto de sangre de Tezccttlipoca. Oontribuy6 felizmente que el gran sacerdote de Q-ttetzalcoatl era en aquella sazon un j6ven bermo- -so, pues, segun los Anales, tenia treinta a.fios, y el cual vi via en castidad y 1 V6ase mi tragedia "Quetaalcoatl.'' DUR.AN.-TOM. Il.-AP. 12 |