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Show 34 . extendfa en elias en maravilloso rielaje su apacible luz, ala que formaban semejanza de escamas, las olas al moverse en su continuo vaiven. Pusieronlc pues por nombre Quetzalcoatl, la oulebra preciosa, que siendo quetzctlli una pluma belllsima del pajaro de su nombre, como adjetivo queria decir tanto como hermoso. Y de ahl vino traducir Qu,etzalcoatl, oulebra cou plumas, que es uno de los modos con que en geroglHicos yen monumentos se le representa. Fueron pues los principales dioses de los nahoas, el sol, la luna y la estrella de la, tarde, Tonacatecuhtli, Tezcatlipoca y Quetzalcoatl; y sus respcctivos movimientos dieron orfgen al prodigioso caleudario mexicano. Curiosa e importante para nuestro prop6sito, es la leyenda que sobre el nacimiento de estos astros conservaba en sus recuerdos la raza nahoa: encuentrase en el c6dice que, siguiendo al Sr. D. Jose Fernando Ramirez, llamo C6dex <;umtkraga, y que ultimamentc ha dado ala estampa el erudito D. Joaquin Garcia Icazbalceta, couservandole su titulo de Histort·ia ile los 1nexicanos po'r sus 1Jintttrt·as. Voy a extractar y explicar la parte conduceute. Por la explicaciou que dieron, el Sr. Ramirez y yo supouemos que al obispo Zumarra,ga, los viejos y los sa.cerdotes y papas de los indios, exl) licando las pinturas geroglificas, de las que algunas estabau untadas de sangre, se supo que en el t'rezeno cielo habitaba, el dios Tonacatectthtli con su mujer Tonacacf.httatl, de cuyo principia no se supo jamas. Estos dioses tuvieron cuatro hijos, entre ellos a Tezcatlirpoca y a Quetzalcoatl; y durante seiscientos aiios no hicieron mas. Pasado este tiempo, convinieron los cuatro hijos de Tonacatecuhtli, en que Quetzalcoatl y Huitzilopochtli (al cuallos mexicanos unia.n ya a todas las tradiciones) hiciesen el fuego, y de el formaron meclio sol que no alumbraba bastante. Luego crearon al hombre Oipactli y ala mujer Oxonwco, y los otros doce cielos. Despues formaron el calendario. Luego crearon a Mictlantecuhtli y Mictlanoih~tatl, <lioses de los muertos. Y finalmente a Tlalocatecuhtli, dios de las llu~ias, y a Ohalchitthtlicue, diosa del agua. Oi]Jactli tuvo un hijo llamado Pilcetecuhtli; y como no tenia mujer, se Ia formaron de la cabellera de la diosa Xochiquetzalli. Oomo el medio sol alumbraba poco, el dios Tezcatli1Joca se hizo sol; y eut6nces crearon a los gigautes, que comfau nada mas bellotas, y que duraron lo mismo que este sol 67G aiios. Al fin de este pedodo dejo de ser sol Tezcatlipoca porque Quetzalcoatl lo derrib6 en el agua; y ent6uces los tigres se comieron a los gigantes, y no qued6 ninguuo. Qu,etzalcocttl dur6 de sol otros 67G alios, hasta que Tezoatlipoca lo derrib6 a su vez levantando graudes huracanes. • 35 Basta este ligero extracto para nuestro in ten to. Par else ve que el principal dios fue el sol Tonacatecuhtli, al cual hicieron padre de Tezcatlipoca la luna, y de Quetzalcoatlla estrella de la tarde. Y no debemos preocuparnos de que hablen tambien de Huitzilopocl1tli, dios de la epoca hist6- rica de los mexicanos, porque como lo tenfan por su dios principal, pretendian darle la mayor antigiiedad y origen divino. Los dioses primitivos son pues, Tonacateotthtli, Tezcatlipoca, y Quetzalcoatl. Lo primero que crean es el fuego, lo que confirma lo que llevamos dicbo sobre la vida de las cavernas. De este fuego hicieron nn medio sol que alumbraba poco, y es la luna en su cnarto creciente; pero no bastaba su luz, y se hizo sol TezCtttlipoca alumbrando como luna !lena. Despues Q~tetzalcoatl derrib6 a Tezcatlipoca que se b.undi6 en las aguas; y domin6 como solla estrella de la tarde, hasta que a su vez Tezccttlipoca derrib6 a Quetzalcoatl. En la primera vez el sol fue destruido por el agua, y es el cataclismo .Atonatitth; y en el tam bien fuerou destruidos los gigantes que nada mas carnian bellotas, y que erau los paquidermos que acabarou con Ja separacion de los continentes. Asi la tradicion inconscientemente ha venido a hermauarse con las verdades que ultimameute ba descubierto la ciencia. El segundo cataclismo es producido por los huracanes, y es el Ehecatonatiuh. En el modo de destruccion de los hombres hay ambigiiedad: dice el 06dice que en el primero los tigres devoraron a los gigant.es, y despues dice que en este segundo Tezcatlipooa andaba en tigre convertido. La verdad se deja ver sin embargo: hay un recuerclo, aunque borrado, de la epoca glacial y de la edad de las cavernas, en que las fiera.s fueron el terrible azote de la humanida.d. Hay algo en esta leyenda, para m1 mas importaute. Los dioses crean a Oipcwtli, el sol como luz, y a Oxornoco, y forman el caleudario. Ya hemas visto el hermoso mito y la verdad cientffica al mismo tiempo, de que el sol y la. tierra en sus diversa.s posiciones relativas producen el tiempo; 1 pero aqu1 vemos que concmreu principalmente a esta creacion Tezccttlipoca, la luna, y Qutjtzalcoatl, la estrella de la. tarde. Y es, que el aiio primitivo de los nahoas no se form6 por el curso del sol, sino como nos refiere un MS. aun inedito,2 tuvieron en cueuta los 260 dias que tmscurren desde que comienza a aparecer la estrella de Ia tarde basta que desaparece; y ent6nces formaron su afio de dichos 260 dias,· dividiendolos en 13 meses de U. veinte elias, dando a cada uno de los dias nombre especial. Mas tarde quisieron arreglar este calendario a los periodos de Ia luna que son mas 1 V 6o.se mi Estudio sobre Ia Piedro. del Sol. 2 Tal vez de Motolinfo. 6 de Olmos, en mi coleooion. • |