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Show 50 llaron muerto con una cadena a los pies y con cinco puiialadas en el pecho y junto con 61 machos princi pales y Senores, que j untamente estaban presos en su compaiHa, todos mnertos a puiialadas, los cnales mataron a la salida que salieron de los a.posentos; lo cual si esta historia no me lo dixera, ni viera la piutnra que lo certificaba, me hiciera dificultoso de creer; pcro como estoy obligado a poner lo que los autores, por qui en me rijo en esta historia, me dicen y escriben y pintan, pongo lo que se halla . escripto y pintado; y por que no me arguyeseu de que pongo cosas de que no ay tal noticia, ni los conquistadores tal clexaron clicho ni cscripto, pues es comun opinion que muri6 de llU:1 peclmcla, lo torne a preguntar J a Sl.lotisfacerme, porfiando con los autores que los fndios le m~~taron de aquella pedrada: dicen QUE la peclrada no aber sido nada, ni abelle hecho mueho daiio, y que en realiclacl de verdad lc hallaron muerto {t pufialadas y h1 pedracla ya easi sana, en la mollera, y que este fue el rlesastrado :fin y mum'tc de Monte:mnct y de los dcmas reyes y Seiiores que e.staban presos con 61 en los cctlpttles; con lo cnal so le cnmplieron los pronostieos y · profecfas qne 61 de sf mesmo abb profetizado y dicho; cosa que admira y se conoce ser verdaderamente permision uel muy alto, en quien quiso execntar rigoroso castigo por sus intolcntbles tiranias y cruelclades y vicios nefanclos y sncios en que estaba, en los cuales estaba tan encenegado y metido mas que cuantos hombre~:~ en cl munuo a abido y es de considerar que a.unque dicen algunos que le bicicron muy rico y solemne entierro y que turaron sus obsequias mucllos elias, y que se junta.rou :l c11as mnchos Seiiores y priucipales, pcro csta historia. no dice, sino que su cuerpo y los demas fner·on qucrnados y hechos poh'os, sin houra ni solenidacl ninguna; y que para mas vengarse de 61 fuet·on busca.uos sus hijos y mugeres para matallos. H.ein6 este podcro o y airado Rcy (a.nnque desdiohado) diez y se'is m1os y 1nedio y muri6 el aiio que los osp<tfwles entra.ron en csta tierra por cnya pri sion y mum'te quedo por Rey sn sobriuo llamado Ottauhternoc, 1 hijo del Senor de Santiago; cl cnal por muertc de su padre gobernaba el Tlaltelolco :1. aquella sazon; el cual como vido que todavfa el cerco que abia puesto abia sido de alguo fcto y que abia muerto mas de la mitad de los espafioles, reprendiendo a.l descuido que se abia tenido en aco(J'er- ' b se todos sin dejar guardas porqne no se fuesen los espaiiolcs, enYi6 sus mensageros a todos los pueblos cercanos, que juntameute con sus mexicanos saliesen a los llanos de Otompa. y que a los espaiiolcs que abian queclado les atajaseu el paso y alli los matasen a toclos al tiempo que pasasen por alH, puoo su derrota llevaban a Tlaxcala, Io cual oitlo por todos . 1 Lease C1'itlahuac. V ease la nota de Ia p6.g. 43. 51 aquellos pueblos de Otumba y '1.1eotihuacan y por todos aquellos Otomfes que .viven en aq~ell~ comarca, salieron a los llanos de Otumba, tantos y ~n mumerables m~ws que cubrfan el sol, para atajar el paso a los espanoles; los cuales tnstes y afiigidos y desconsolados y temerosos, y alcanzados muchos de ellos de salud, descalzos y destrozados y muertos de hambre y de sed salieron de Nuestm Seiiora de los H.emedios donde el Marques dej6 aquel nombre puesto {t aquellugar 1 por entender que de mano de esta bendita Senora le abfa venido este remedio . Sali6 de aUf y empez6 a caminar con sus soldados y gente de los amigas que eon el se ablan escapado, y llegado a los llanos dichos de Otumba, creyendo que por aber salido de los terminos de Mexico iba ya con alguna seguridad, hall6 gran des cscuadrones de indios, ten didos por aqueUos campos dando grandes alaridos y voces, y haciendoles grandes amenazas y visages con los cuerpos y dando grandes saltos a una parte y a otra, blandcando las espadas y arrojando muchas varas y piedras. Los espafioles cuando los vieron y tanta multitucl, qucdaron como muertos sin. oingun senticlo, creyendo que su :fin era llegaclo; pero el valeroso Don Hernando Oortes reprendieodolcs su cobarclia y temor, mostranclo un animo mas que humano, ponicndoles por delante que el que los abfa librado del trabajo pasado los librarfa de aquel, los anim6 y conso16 con sus beninas y amorosas palabras; asi, baciendose todos una peya a causa de que por toclas partes los indios los conbatfan, hacienda rostro a unas partes y a otras, procurando dcfenderse mas que ofendcr, viclo el Marques que en nn cerrillo alto que en elllano parccfa, viclo una bandera alzada y junto a ella un valeroso capitan, que en las insinias y armas que tenia y ricos aderezos le pareci6 ser hombre de mucho valor y estima, y que aquel animaba la gente descle aquel altillo, y que en aquel estaba toda la fuerza del ejercito indiana que tanto los fatigaban y maltrataban; y subiendo en uu potro que alll traya un soldado, casi por domar aunque recio y de mucho animo, y tomando una Ianza en la mano, encomend{mdosc a nuestro Seiior CC)n rnucho animo invencible, atribuyendoselo a ternericlacl todos los del ejercito, solo arremeti6 a los f11dios y pasanclo por entre ellos pas6 a donde I del estanclarte estaba, y no pudiendole defender el paso Ueg6 a el y le di6 de lanzadas, 2 el cual como cay6 muerto en el suclo y los suyos le vieron, luego toclos empezaron :1 desamparar cl campo y a lmir. El 1 No cs probable que Cortes &c ocupo.ro. de clio. El primitivo bistoriaclor de cstc So.ntuo.rio, cntcramonto o.bo.ndonado en los aftos iumediatos ll la conquista, y deRpues tan famoso, dice que: "los priu~oros ospaiiolcs lo llamarou do la Victo1'ia, y ucspnos de Nuestro. Sonora de los Remedios. (Cisneros, llistoria de cl priucipio y 01igcu de Nuestro. Sefioro. de los Remedios. M6xico, 1621.) 2 Cort6s no so atribufa csta hazaiia on su carto. al Emporador, poro sl se Ia atribuy6 bajo Ia pinrna de Gomnra. Borual Dinz, dice que fu6 de Juan Salamanca, a qnieu el Rei premi6 dlt.udole por |