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Show 48 valeroso mogo y acu dl· a a" la lignea y sangre de donde decena·d ia. Traydo a la ciudad, fue eleto por rey della en paz y ~o~cor Ia y sin contradim.o n de nm. guna persona, y <H con tod. a .u m1ldad rece. - bi6 cl mando y cura del reino, con carga de s~bJeClon y vasal~aJe a los de A zcaputzalco, pues a causa de auer edrficado en sus twr- Tas, lcs eran tributarios. Fuc casado estc rcy con una gran senora, natural de Culhuacan, Hamada Jllancueitl, la qual fuc est¢ril y infecunda, de lo qua: el rcy y todos los grandcs tcnian mucho pesar; y temicndo su r~mo no qucdasc sin ercdero, tuvieron los senores entre sf. su ~~n eJO Y determinaron de que cada uno dellos le die e una de sus hlJas,. para que tcnicnclolas por mugeres, dellas nacicsen cre~e~os del re1~o Y succsores; y dctcrminado n e te acucrdo, Acagtth fue el pnmero que lc ofrcci6 su hija, diciendo: "Senor, ya emos visto que dcspues que te ca astc no a ido el Senor de lo criado, d.e la noche Y. el dia, erviclo de te dar hijo de nuestra enora y rc.ma lllancue?,tl, por Io qual detcrminados tus va allos, an sido de acuerdo que cada uno de no otros tc de una hija por mugcr para que, dernas do que clcspuc de tus dia quedc sucesor en el Reyno, queremos que sean nuestros nicto y hijos, para que la nacion mcxicana sea. mas ilustratla y cngrandecida; y a f, aquf, senor, tc trnigo {t mi hija para que sea tu mugcr y compatlera y te sirvas della." Lo mesmo izo Tegacatetl y Ahuexotl y Ogelopan y Tenoch y Aatl; en :fin, cada uno de lo grandcs senores y ayos del dios, cada uno ofreci6 al rey una de sus hijas por mugct·, al rey, 1mra que de alli sucediese linia de los senores de la tierra. Empcro antes que pasemos a contar de los que destas senoras nacieron, es de sauer que el Rey tenia una esclaua natural de Azca .. putzalco, de un barrio que Haman Cuauhacalco, y em tan hermosa y de tan buen pareccr, que enamorado el Rey Acamapich della, la vino a aver, la qual quedando preflada, pari6 un hijo y llamaronle ltzcoa.Zt, el qual, aunque bastardo y hijo de esolaua, vino a ser tan valeroso, que vino a ser Rey, como en su lugar diremos rlel. Empero, no privandose 1 los mexicanos de su inten~ion y deseo, hiQo Dios tan fecundas sus hijas, que empe~aron a parir, y el rey {t te-l No retrn.yendo. e por osto. •• 49 · ner h\jos, y cl uno y primero que na~i6 1 llamaron Cuatlecoatt; al egundo Clacauepan 1 y al ter~ero Tlatolyaca y al cuarto Vitziliuitl, y este naci6 de la h~ja del ayo de Vitzilopochtli, que se llamaua Cuauhttoquetzqui (como otra voces lo hemos nombrado ), por ser cl mas prencipal de lo quatro: el quinto hijo fuc llamado Epocatt, 2 y el scsto hijo de estc Rcy c llam6 lcutlternoc, 3 y el setimo sc llam6 Ttacacochtoc, y bien pudiera poner las declaraciones 4 destos nombros y lo qu en nuestra lcngua significan, pero pareciendomc ser gastar tiernpo en poner tirnoloafas, pues AUN el nombrallos pudiera escu ar, i para la descndencia dcllos adelante no forc;ara. Entre e - tos naci6 una hija, la qual c llam6 Mattotaxoch, la qual fuc scfiora Je Chalco, casada c n cl t> flor de aquclla provincia. Pero por qu uo dcxemos {t la principal muger del rey sin haccr mencion della, al principia tuvo tanta tri tega y pesar de verse asi menospreciar, que su do cran fuentes de dia y de nochc. El rey viendo su tri tec;a, tcniondula en mucho y amand la entrafiablemcnte, la consolaba todo lo que podia, Yl ella viendo qucl rey tanto la amaba, pidi6le una merced, y fuc, que ya quel Senor de lo criado la auia privado del {ruto de bcndicion, que para que aquel pueblo perdie e aquclla mala opinion que de infecunda della tenia, le concediera, que aqu.cllos hijos que de las otras mugeres nacie' en, que en nacicndo ella lo metcria en su. seno y se acostaria finaicndosc parida, para que lo que cntrasen {t vi italla le dicsen el parabien del parto y nuevo hijo. ~ l rey inclinado a su ruego, mand6 asi e hicicse, y asf, en pariendo que paria 5 alguna de aquellas mugercs, acostabasc ella en la cama y tomaba el nino en sus bra~ os y fingfase parida, rccibiendo las gracias y clones de los que la visitaban; y aunq ue en realidad de verdad no era ella la par ida, qucdaba en opinion dcllo, y el dia de hoy la ay y contradicen este punto con diferentc informacion, la qual no tuve por verdadera y cierta, por ser muy contraria de ]a comun opinion, ques la que L 'l'lacahuepan.-Niuguna palabrll. mexionna comienza con eta. 2 Pt·obablomento Epcoatl. a Quizu, aunque inoorL·octamento! lltuitltemoc; con propietlad l!tuitemoc. 4 La t1·aduccion 6 inte1'P1'etacion. Si ol autot• ln hubiom dado, podrin tnmbion llL~bOl'~:~ o heoho la oorreooion con toda soguridad. 5 Tm1 luogo como pnria. 7 |