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Show 44 por or malo:s y d ruin inelinacion: antes que nos voamos en algun apriolo, parcceme que ganemos por la mano y ellijamos un rey que a cllos y {t no otro nos tcnga subjeto~, y si os parece no sea de nuestra congrogacion, ~ino traigamoslc de fucra, pues esta. Azcaputzalco tan cerca y e tamos en sus tiorras; 6 sino, sea de Culhuacan 6 d la provincia de Tezcuco. Ilablad, mexicanos, dec:( lo que en • csie caso os parece." · En acl:tuando Me9i esta pl:Uica, que asi se llamaba el que la pro-puso, {t todos parcci6 muy bien y dctcrminando c1 caso se deter min6 que ni a Azcaputzalco ni {t la provincia de Tezcuco fuesen, sino que, pues que ellos auian vivido en tierras de Cull~ttacan 'l que alH ten ian hijo y ·hijas ca adas y nicto~, as£ de hijos de senores como de toda gento, que de alli sc cscojiesc un hijo de sus mesmo hijos, de ln. mejor casta de los unos y de los otros, y que aquel reynase en J,fexico; y acord{mdose de un gran sei1or que auia venido con cllos, que c auia qucdado en Culhuacan quando salieron huyendo, que se Ilamaua Opochtzin, el qual se auia casado alH con una muy prencipal senora, el qual auia dexado un hijo que se llamaua Acamapich, y que aquel querian y era su voluntad que reynase en Mexico y que fuese senor del: lo qual luego dcterminaron de irlo {t pedir {t Culltuacan al senor del, el qual se llamaua Nauhyotl; y sobrc ello llev:ivanle gran presente 1 de lo que segun su poca posibilidad purliescn, y asi aparejando el presente escojicron dos personas ancianas y ret6ricas para que ellos fu€sen con ol mensaje al rey de Culhuacan; los quales fueron y ofreciendo su presente, propusieron su platica en esta forma: "Gran Senor: nosotros tus siervos y vasallos los mexicanos, metidos y encerrados entre las espadanas y carri~ales de la laguna, solos y desamparados de todas las naciones, solo encaminados por nuestro dios al sitio dondc agora estamos, 2 cuya juridicion es de Azcaputzalco y deste tu reyno y de la juridicion de Texcuco, con todo eso, ya que .nos aueis permitido es-tar en el, no ser{t justo questemos sin senor y cabe~a que nos mande Y corrija y nos guie y ensefl.e c6mo emos de vivir; nos , li- 1 Obsequio 6 rega!o. 2 E1 pasaje d que sigue dice en el An6nimo citado ' aai ,· -"qu""' es'·ttu. "v 'n la J·U ri·S d'l OL· Oll esto tu reyno y d·e .A zoapuftaZco y de Tetttuco, con todo eso, etc. 45 bre y d~fienda yam pare de nuestros enemigo ; por tanto acudimos a tf sabwndo que entre vosotros ay hijo~ rle nuestra generacion emparentada con la vuestra, salirlos de nucstras entrafl.as y de Ia. vuestra ; sangre nuestra y vue tra, y e pecialmentc tenemo noticia que ay aqui un hijo de Opochiztauatzin, el qual tiene por nombre Acamapich: es hijo de una hija tuya que se decia Atotoztli; suplicamo te que nos lo des por senor para que le tengamos en lo qual 1 mereee, pues es de la lignia de los mexicanoiS y de los reye y seilores de Culhuacan." El Senor de Oulhuacan, viendo Ia petieion de los mexicanos y quel no perdia nada en enviar a su nieto a reinar a Mexico, .Ie respondi6 desta man era: "Honrados mexicanos: yo c oido vue tra. ju"ta petieion y huelgo mucho de en e o daro contento, porque demas de ser hom·a mia, ide que me sirue aqui mi nieto7 'romaldo y llcvadlo mucho mucho de nora buena y sirua a vuestro dios y cstc en Iugar de Vitzilopochtli, y rija y gobierne las criaturas de aquel por quien vivimos; senor de la noche y del dia y del viento, y sea senor del agua y de Ia tierra de la nacion mexicana; y hago os saber que si fuera muger, como es hombre, que no os lo diera, y que si su madre fuera viva, que tampoeo lo hiciera sin su voluntad; pero llevalde nora buena y trataldc como el mere<;e y como a hijo y nieto mio." Los mexicanos, agradeciendo la liberalidad del rey, le rindieron muchas gracias y lc suplicaron les diese juntamente una senora con .quien su rey fuese casado, que fuese de la mesma linea; y as£ luego lo casaron con una senora que se llamaba llancueitl, y traycndolos con toda la honra poslble, saliendo toda la nacion mexicana de hombres y mugeres, chieos y grandes, a recibir a su rey, lo llevaron derecho a los aposentos reales que, aunque pobres de presente, tenian hechos para aquel efecto, y sentandolo a el y a ella en unos asentaderos juntos, los juraron por reye de Mexico, prometiendoles obedien<;ia y subjecion; y levant{mdose uno de aqucllos viejos ancianos le hi<;o una platiea, dieiendo: " Iijo mio, senor y rey nuestro, seais muy bien llegado a esta vuestra casa y ~iudad, entre estos carri<;ales y espadafias, donde los pobres de vuestros padres ·I Qne 61. |