OCR Text |
Show 366 atambor, Iucgo ponian el inccn~~uio deln,ntc de CI, r descabezaba lucao una codormz y cchabala en el suelo, y aiH an(~1.bn. rcboleando, y miraba :i que parte iba; si iba volteando Ucia cl norte que cs Ia rnano derccha de Ia tierra, tomaba mal aglicro y decia csto el duciio de casu, tnfermarc 6 mon'r6; si Ja codorniz voltcando iba Ucia el occidcntc 6 Ucia ]a mana izquicrdn do Ia tierra que es cl mediodia. alegrtibasc }' dccia, pacijico cst6. D-ios, no ticnc cnojo contra mt. Despucs de hccho esto, tomaba cl incensario, y poniase frontero del atambor, y levantaba el inccnsario ticia el oriente, y luego se \'olvia :icia cl occidentc, C inccnsaba ticia aquclla parte otras cuatro voces, lucgo sc volvla :!cia cl mcdiodia y <l.cia cl norte, y hacia lo propio. Habicndo hecho csto, echa· bn. las brasas tiel incensnrio en cl hagar 6 fogon alto, y luogo salian los que habia n de hacer el a roy· to, y comcnznban a cnntar y baila r. SH iia primcro cl tlacatccall, y lucgo trao el todos los soldados que 15C Haman quaquachicti, y los que Haman otom,l, y los ~ue Haman tc9uivarptc que son como soldados vicJOS; ernpero los sciiorcs mercaderes y los otros no bailaban, sino estaban en sus aposcntos mirando, por< JUC ellos cran los autorcs del convite, y los merca· dcres viejos recibian a los que venian, y diibanlos narcs a cada uno scgun su mancra, con diversas maneras y hcchuras los ramilletcs de elias. La pr1. mera cosa que se comia en el convitc, eran unos J1onguillos negros que ellos IJaman nanacatl, que embor· rachan y hacen ver visioncs, y nun provocan a luj~ ria; esto carnian antes de amanecer, y tam bien beb• an cacao antes del alba. Aqucllos honguillos los commn con nHel, y cuando ya sc comcnzaba.n a escalent. ar con cllos, cornenzaban a bailar, algunos cantaban, otros lloraban porquc ya cstabnn borrachos con los honguilios, y algunos no querian cantar, sino scntabansc en sus uposentos, y est:ibanse alli co· 367 mo pensa.tivos: algunos velan en VIsiOn que se morian y lloraban; otros vefan que los comia alguna. bestia tiara: otros que cautivaban en Ia guerra: otros: que habian de scr ricos: otros que habian de tenor muchos esclavos: otros que habian de adulterar, y les habian de hacer tortilla Ia cabe7.a por cste caso: otros que habian de hurtur algo por lo cual los hablan de matar, y otras muchas visioncs que vcfan. Despucs que habia pasado Ia borrachcra de los honguillos, (a) hablaban los unos con los otros acerca de las visiones que habian visto. Cuando llcgaba Ia media noche, el dueiio de la casa que hacia el convito, ofrccia papeles gotcado~ con ulli, con aqucllas ccremonia:; que arriba se dijeron. Tamb.icn bebian ca· cao andando bailando, una 6 dos voces antes que amanecicsc hasta la maiiana, y cantaban algunos cantares, y Ja ofrcnda que hacia cl dueiio de Ia casa con las ceremonias arriba dichas, y en acabiindola de hacer, cntcrraba las cen.izas y otras cosas en el mcdio del p<'itio, y dccian cuando las enterraban: ,.llqut habemos pla11tado vitztli,vietl, de aqut nacerli Ia comida y bcbida de nuestros hijos .'If nietos, no se perderCP' querian dccir que por virtud de aquella ofrenda, sus hijos y nietos habian de scr pr6speros en este mundo. CAPITULO IX. De las t:ercmonias que hacian al romper el alha, y lo que hacian en saliendo· el sol. Cuando ya queria snlir el alba, a Ia hora que sale el lucero, cnterraban las cenizas del sacrificio, las flares, y las cai'ias de perfumes, porque cclabau mucho que no las vicsc algun inficionado de algun vi· (11) Jgual nombrc conservan nun en Oaxac.a, son (Nanacates) muy sa.brosos, pcro nec:csit<tn csc:ogerse 11ucs lo!i bay Tcncnoso!l. |