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Show 164 ha co m e n~aU.o a poner en el vientrc de Ia mozuela recien c asada; y si ellos csto \'icrau y oycran, no hay duda sino que lloraran de pla cer, e hicicran muclms gracias por cstc gran benefic ia. P~ro nuestro seiior que esta en todas partes nos ha dcjado de csta manera en pobrcza, <JUC ni hay viejos ni personas que puedan satisfacersc con scm~i antcs ca~os. i Quien pucs podr:i Homr y dolersc? c·Y qui en podr{ t sufi cientcmcnte admirarse de lo <JUC pasa? No hay otros sino los que ahora tencmos a.a _rgo y gobcrnamos, (JUC somos como muchachos de poco saOcr y de poco valcr, que no haccmos cosa <i dcrcchtts, [a] todo lo despcrdic iamos, y todo Jo dai'iamos. ~ Quien nos podril rcspollder? i Quien podra orar en respucsta de lo que habeis dicho? Si fu cra en presencia de vuestros pad res que a qul hemos n om~ brado y acordadonos de su ant ig uedad y su be:r, cllos por cicrto 11Ubieran sufi cicntcmcnte respondido a Jo que habcis dicho, y no con pocas lagrimas se ma~ ravillaran de lo que habcis orado; pcro por fa lta de cllos nosotros pobrcs, y mcng uudos de saber, dire· mos alg unas pocas palabras impcrfectas y !JUrbaras como balbu tienclo, s in ordcn ni modo, para r espon· der a lo que habeis dicho. Lo que a hora ul prcsente se o!fccc dccir Cs, que nuestro sci10r que cs. t6.. en . tod.o Iugar, ha abicrto cl cofrc y Ia caja cie ~u s mtsen cordJas, f] UC solo Cl Ia poscc. ~Por ventura mcrccemos 0 mcrcccrfau nucstros padres <juc ya son pasados de cste mundo, que los ha quitado el I!!ICiior de sobre Ia tierra, y Ies ha puesto en el lu. gar de Ia obscuridad que no tiene ventana ni por donde Ie entre luz? ~Por ventura floreccr:l y brotani lo que ellos d e~j aron plantado, asl como m ag u ~y profund a· mente, que fuC el deseo que tuvieron que se multiplicase (a) iDe cu nntos de nuest ros gobcrnantcs pudier:tmos hoy decir e sto mi srno! mas por no!otros lo dico la nacion que llora y rcc1en~ te I!UB cslra vio.u1 locuras (i ignoranci01. 165 911 generacion? no sabcmo~ la joyn, 6 prccioso sartal de fla res conquc ha adorn aJo nuestro sciior a esta mozuela, porquc l<.t merced que nos ha hecho, csta en ella escond1da com? en un cofrc; acaso no mercccremos ni sercmos d1gnos de verla y gozarl a? y sera como del iria que sc pasa .en vano: jOh s1 nuestro seiior a hara tendra por bJCn de sacar a Juz csta fiesta y csta maravi ll a! ~s i ~ ::-:aldr:i ul ,mundo, y serf\ po!ible qu~ le vcamos, o ~c p~s~ra co!no suc iio? y por<JHC p10nso que con rn1 pro!Jg u1acl ofen~ do vuestras cabezas y cstOmagos dandoos pena, par Cccmc lo mas acertado <1 ue cH ile; oremos a Dios, y espcremos en su misericordi a. T al vcz merecemos que venga {t luz esta criaturn, 6 acaso c ~ su edad t ierna, 6 quizas Ia perdcrcmos antes de sahr al rnu n~ do· y nsf no quicro decir mas, sino rogar :i nuest ro seftor fjUC csHi en todo Iugar, que dC rcposo a vucs~ tros hucsos, y {t v u~ stro :inimo todo contrnto. D es~ pucs de esto, el orn.dor cndcreza sus palabras ft. Ia preliada, y si cs muger noble, diccla de esta manera. CAPITULO XXI. Del lenguage que usabw, daudp fa cnhorabuena a Ia pre~ Urula lwhlando con ella: cs tJ!Iitlca de algmw de los paricntes de il; avisftbcmla en ella muc!tas casas, y acabim~ dola de hablar, !tablaba lucao ll !iUS padres de los mozos, y a(l(utiO de cllos res1?ondc a los oradorcs: tamhien la preilada lwhia ii su sucgrN y sucg ra. jNicta mia muy amada y preciosa c~m10 cltal· chivitc y zafiro, noble y generosa! ya cs c1erto ahara c1ue nuestro seiior sc ha acordado de v?s, el ~u al C.St{t Cll toda parte, y haec mercedes fi qUJCfl 9lUCrC: ya est:! claro que estais prciiada, y que Du1~ os quicre dar fruto de gene,r.a cion, y poneros un Joyel |
