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Show 244 LIBRO SETilUO QUE TRATA DE LA ASTROLOGIA NATURAL; QUE .ILCANZARON LOS NATURALES DE ES T.Il N. E. CAPITULO I. Del Sol. [a] ~.L so~ . tie~e propiedad de resplandecer, de alumc~ a'' J 0 cc ar rayos ?c si: es caliente y tuesta ha-su ar, pone hosco o loro cl cucr lO I ' d ln. pcrs?na. Hacian fi esta al sol unal v~J c~dc:r~fioe en el sJgno que se llamaba naviolin antes de I ' fiesta ayunaban cuatro dias como vigita d I· fl a ~a, y en ella. ofreciun incicnso y sangre de el a~ o~~~ ~~~d~uatro ve_...ccs, una en salicndo cl sol, otra al me .. . ta, otra a Ia hora de vfspeT'ts 1 lna; cuando a Ia rna_ . ' . Y cuam o se posol su obra . , n~na saha decmn: ya cornietlza el Ja pucsta dg{f'~e ,sedm _o que acontecerti en este dia? y a ] . so CCJ a n: acab6 su obra 6 A as Yeccs cuando sale el sol, parecc d ju. tarca. grc, toras voces parccc blanq . e co 0 1 de san4 lor enfcrmi 0 uccmo, Y otras sale de coque se le z_ 't por razon de las tin ieblas 0 de las nubcs rcce colora~~ er~~~=~~ C~lilndo so eel ipsa el sol paturba , sc rem e~c 6 revuc?vee )~~ dc~allsosiega 6 que sc ' ' ... man ecc mucho. Cuan- [•Jl Esta C!l rropinmon tc hahlando lln~ mo as metamorfu::i!S de Oridio; • rclacion milol6gica, co- 2<15 do le vc la gcntc, luego se nlborota y t6mnle gran temor, y luego las mngeres Horan a voces, y los hom· bres dan grita hiriendo las bocas con las manos, y en todas partes se daban grandcs voces y alaridos, y luego buscahan hombres de callcllos blancos, y earns blancas, y los sacriHcaban al sol, y tamllien sacrificaban cautivos: se untaban con Ia sangre de las orcjas, y juntamente se a hugcrahau ostas con puntas: de maguCy, y pasaban mimbres 6 cosa semcjante, por los ahugcros que las puntas habian hecho; y luego por todos los templos cantaban y tafiian hacienda gran ruido, y dccian si del todo se acabuba de eclipsar cl sol: mmcamas alumbrani, ponerse han popetuas t£nicblas, y dcscenderii.n los dcmonios y ven.dramws t1 comer. CAPITULO II. De Ia lw1a. Cuando Ia luna nuevamentc nace, parece como un arquito de alambre delgado, aun no respla.ndece, y poco a poco va crccicndo: a los quince dia.s cs l!cna, y cuando ya lo es, salu por el oriente. A la puesta del sol parecc como una rueda de molino grande, muy redonda y muy colorada, y cuando va subiendo se para bl anca 6 rcsplandeciente: aparccc co· mo un conejo en medio de ella, y si no hay nubc~, resplandccc ca si como cl sol y medio diu; y dcspues de !lena cumpl ida.mentc, poco a poco se va menguando hasta. que sc v(.t ii hacer como cuando comenz6; diccn eutOnccs, ya se muerc Ia luna, ya se duermc mucho, csto cs c uando sa le ya con el alba: al t iempo de Ia conjuncion diccn, ya es muerta Ia buw. La fiil.mla del concjo que estU en Ia luna cs csta. Dicen que los dioscs sc Lmrlaron con ella , y di enl~l· ln. con un concjo en Ia ;ara, y qued61c cl concJO |