OCR Text |
Show 116 haber frecucntadola en Ia juventud, porque se :>caba Ia potencia, y Ia sjmicntc humana; pero nosotras las mugeres nunca nos hartn.mos ni nos enhadamos d~ csta obra, porquc es nuestro cuerpo como una sJma, y como unn barranca honda, que nunca se hin~ elm, recibe todo c~anto lo echan, y descan mas, y d?manda mas; y s1 esto no hacemos, no tenemos v1da". Esto .te digo hijo mio, para que vi vas rccatado, y con dJ~crecwn, y que vayas poco ii poco, y ~o .t~ dt:s pnsa en estc negocio tan fco, y tan per4 JUdtc~al. CAPITULO XXII. E:: que u contiene .. Ia doctriua que el padre principal, 6 s~nor daba_ a s" hyo acaca de las casas, !I politica estct'J~ r: convtene U saber: como se habia de lwber en of dor~'-. com_cr, heber, ftablar .'If at c! Jragc, y tm el andar, n:p,.r~r) oa; y gWJ se guarde de comer cornida de mano de malas mugeres, porque dwi hechizos. Hijo. mio: ya tc he ~icho muchas cosas que son n ~cesanas para tu doctrma y buena crianza, para que VIvas ?n este rnuudo como noble, hidalgo y persona que VI~nC de mayores, iJustres y geOCfOSOS; restame el dcc1r otras algunas, que te conviene mucho saber Y encomendar a Ia memoria, las cualcs recibimos ?~ n~estros amepasados, y porquc esto seria hacerlos lJljUrta, no tc las he de decir todas. Lo primero cs, que .e:cas muy cuidadoso de despcrtar y velar, y no duermas .toda Ia nochc, porque no sc diga de tf que eres dormdon, pcr.ezoso y soi'iol.iento. Min.l que te levantes {~ Ia medm noche 6. orar, suspirar, y a deman? ar. ?- nu~st.ro sci'ior que cstU en todo Iugar, que es InVIStble c Impalpable, y tcndn'is cuidado de Lmrrer e! Iugar donde estan las imagines, y de ofrccerlas inetenso. Lo segundo, tendras cuidado de cuando fu"" 147 res por Ia callc 6 por el ~amin~ que vayas sosc~adamcntc, ni con mucha pn sa, n1 con mucho espacw, sino con honcstidad y madurcz; a los que no lo hacen asf lllimanlos ixlotonwccuecuctz, f}UC (tUierc decir perSO~ U quo y{L mirando U di~·crsas p~rtcs com~ loco, J persona que v{t andando sm honcst1dad y sm gravcdad, como libiano y b~tlli~i~so. Asimismo di~cn de los que van muy dcspac10 vl.vdaxpulxocotc:pulhcllCflpuc, que qui ere dccir persona que v(t arrastrando los pies, que anda como persona pcsada, y que no puede andar de gordo, 6 como mugcr prei'iada que va and~ndo hacienda mcncos con cl cucrpo. Por cl Gammo ni ircls cabizbajo, ni tampoco irUs inclinada Ia cabeza de !ado, ni mirando c:i.cia los !ados, porque no sc diga de tf que eros bobo, tont3, mal criado, y mal disciplinado, y que andas como muchacho. Lo tcrcero que debcs notar es acerca de tu hablar; codvicne <JUC lmbles con mucho sosiego, ni hablcs apresu~ radamentc ni. con dcsasosiego, ni alzcs Ia voz, por< JUC no se diga de tl que orcs vocinglcro y dcsentonado, hobo, alocado 0 rUstico: tcndrUs un tono moderado, ni bajo ni alto en hablar, y sea suave y blanda tu palahra. Lo cuarto que de!Jes ~wtar es, q~c en las casas que vieres U oyeres, espec.mlmcnte s1 son malas, las disimules y callcs como s1 no las O):cras, y no mires curiosamente a alguno :J. Ia cara, n1 notes con curiosidad los ata.vios que trae, y la rnanent de su disposicion: tarn poco mires con curiosidad cl gcsto y disposicion de Ia gentc principal, mayormcntc d~ las mugcre..s , y sobrc todo ~c las casa~as, porquc die~ el refran que el 9.11e cwwsammte nura {t .La muger adultba con Ia vista, l a J y algunos fueron pumdos con peua de mucrtc por csta causa. Lo qutnto que dcb{! s notar cs, que te guardcs de. ofr ,las c?sas qua ~;e dicen que no tc cumplen, espccta.l.mente v1das agenus y nuevas; dlgasc lo que sc dJJerc, no teu.gas cuidado do ello, haz como si no lo oyeras, y s1 no [a] Es doctrina del cvangclio. TQm. II. !0 |