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Show 354 su parte, y lucgO cl sefio~. 6 ~efiores de la mismo. provinc ia del pueblo de )1. ualanco y del pueblo de Cimalecactl, y Quat:aqualco les ~a~an grandes piedras ]abradas verdes, y otros chalchn•,tcs labrados largos y colorados, y otro~ que sou esmcraldas, que ahora. sc llamnn quct:all::lll, y otra mancra de esmeral~ das, y otras mucbas piedras de var!as rnancras. Tam~ bien lcs daban caracoles y nbanJcos colorados, y amarillos, y palctas, cacao del r~ismo color, hcchas de conchas de Tortuga y otras pmtadas como cuero de Tigre, blanco y negro. Dabanles plumas r.icas de muchas manerns, y cueros labrados de bcst1as fieras, todas estas cosas tralan los mercadcres de aquella provincia de Xicalauco para cl sefior de Y.JC. xico; y como volvian y llcgaban a Mexico, luego lo prcsentaban al seiior. De cst.a ma~cra dicha, hacian sus viajes los merca.d.crcs de M~x1co que llamaban 1'hcunencnquc, ycndo fl. aquella t1erra de .llna-. oac, que cst6 ccrcadc cncmigos de los MCxicanos. [a] El sei'ior de MCxico queria mucho a estos mercaderes, tenianlos como a hijos, como a personas nobles. y muy avisadas, y eeforzadas. (b) CAPITULO V. De donde naci6 que los mcreaderes se llamaseu JVaoalozJomeca. La razon par que c icrta parte de los mercadcres se llam6 Naoaloztcmcca, es porque los rnercaderes mcxicanos entraban ii tratar en aquella provincia disimu .. }ados, tomaban cl traJc, y cl lenguage de la misma provincia, y con csto trataban entre ellos, y sin ser (a) Es dccir en Ia Rnya divisoria del gobicrno anliguo de Goatcmala y MCxico. , (b) Esto cs tan cicrto f'jUe por .ha~cr dado mue.rte ll_algun:ts, )-lf!xico dcclar6 Ia guerra i las Pru•mc1as dondo hab1an i ido agra· liados. 355 conocidos por mexicanos. En csta provincia de Tzinacantlan sc haec el ~unbar, y ta.mbicn plumas rnuy la rgas que Haman quctza!Ji, porquc a!Ji hay muchas ave~ de estas <JUC Haman quolzaltotolme, espccialmeptc en tJCrnpo de verano que co men alii las bcllotas. 'rambien hay rnnchas aves C]Ue 1/arnun Xiuhtotome, y otras (JLIC se Haman chalchiuhtotome, que \'icncn a comer el fi·uto de un :irbol, ()LIC llaman X£uhtototl la3 que no osan tocar con las manos, sino que rosan de presto heno vert.le para tomarlas, de Inaucra que las manos: no llegucn {t Ia pluma, y si las taman con las mn.nos dcsnudas luego la color de dicha pluma se dcslalm, y se para como amortiguada de Ia color de azul clara deslabado . Hay tambicu en aquclla provincia muchos cucros muy preciosos de animalcs ficros. Estos mercadercs que sc Hamaban ./Vaoalo.:tomeca, compraban estas casas dichas, rcscatabanlas con navajas de t't.:tli, y con lancetas del mismo, con. alwjas, y cascabelcs, con grana y piedra Ulumbre, con almagrc y unas madcjas que sc llarnan tochivitl, hcchas de pelos de conejos. Todas cstas cosas tenian estos mercaclcres Naoaloztornocu con que rcscataban el ambar de que sc haccn los !Jesotes: ricos, y otros que llamaban lencolli, los cuales usaUan los hombres valientcs por mucstra de su valentia., <jtJe no temian Ia mucrte ui Ia guerra, y eran mti.y diestros en cl art.c de pelcar, y de cautibar. Hcscataban con lo dicho, arriba tambien plumas ricas como qu,el::a/es y xiu.htetotl, y chalchiuhtototli, y si alguna vez Jcs conocian cl. estos mcrcadcrcs mexicanos los naturales, lucgo loa mataban, y asi anda.ban con gran pc.ligro precaucion y con gran micdo; y cuan~ do ya venmn, y salian de aquella provincia para rcgrcsar a su tierra, venian con sus mismos trages que entre aquclla gcntc habian vcstido; y en llegnndo :i Tocht~ pcc tlonde e ran tcn.idos en mucho, a Ui dcjaban aqucl trnJe, y tomaban el mexicano. Tam bien alJi los daban 'l~m. If. 46 |