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Show 66 de criar ni producir Ia~ yerba~, ni arboles, ni cosa. ninguna, que pueda servir de mantenimiento; solia como padre y madre criarnos y darnos lechc, con los mantcnimientos, ycrbas y frutos que en ella se criaban, y ahara _ todo esta perdido; no parcce sino que los dioses '1'/aloques lo llcvaron todo consigo, y lo cscondicron dondc cllos cstan rccogidos en su casa., que Cs el paraiso torcnaJ. jSeiior nuestro! todas las cosas que nos soliadcs dar por vuestra largucza, conquc viviamos y nos alcgrUbamos, y que son vida y alcgria de todo el rnundo, y fJUC son prcciosas como esmcraldus y como zafiros, todas estas se nos; han auscntado y se nos han ido. jSeiior nuestro, dios; de los mantenimicntos, y dador de cllos, humanlsimo, y pfadosisimo! ~quC Cs lo que habeis detcnninado hacer de nosotros? ~Habeis nos por ventura de! amparado del todo? ~no so a placara vnestrn ira t! iml.ignacion? habcis dctcrminado que se picrdun todos vuestros siervos y \'Usallos, y ((UC quede desolado y despoblado vucatro pueblo, reino, 6 seiiorfo? ( l~sta ya determinado par ventura que esto sc ha(ra? ~?et?nnin6se en cl ciclo, y en el inficrno? jOh scifor! :!!lqlllera conccdednos csto, que los nii'ios inoccntes que aun no saben a~dar, y los que cst:in aun en las cunas_, sean prov01dos de las casas do comer, porquo VlVan y no pcrczcan en csta neccsidad tan gr~n?e. ~Que han hecho los pobrecitos para que scan a~ 1g1dos . y muertos de hambrc? ningunas ofcnsas han l_}ed10, !11 saben qt~c cos_a cs pccar, ni han ofcndido a Jos diOSCS de\ CICio Ill :i los deJ inficrno; y si 110- SOtros homos ofcndido en_ muchas casas, y nuestra~ "Ofensas han llcgado al c1clo y al infierno, y los her! ores de nu?stros _pccados se han di latado hasta Jo3 fmes de Ia t_rena; Justo es que seamos destruidos y acabado_s, nt tencmo~ ~ue decir ni conque nos escusar, m conque res1st1r a lo que estci dcterminado contra. nosotros en c1 ciclo y en el infierno. lUlga- 67 se, perd:lmonos todos, y csto con brevedad; pcro no 5ufdtmos tan prolija fatiga, que mas gra\'C cs lo que padeccmos, que si estuviesemos en f"t_wgo. (JUemiindonos. Cierto, que cs cosa cspantable sufnr Ia hambre, quo es a sl como una culebra que con deseo de devorar, cst6. trar.rando Ia sa liva, y est£ carlcando demandando de Zomer, y cst{t silvando porq_ne lc de~ comida; cs cosa cspantosa vcr la ngoma qu~ ttcne dcmnndando el a li men to. Es csta hrnnbrc tan mtcnsa, como un fuego encendido, que cstft echando de sl chispas 6 centellas. H<igase scii~r. lo qu~ ~uchos alios lta QUO ofmos dccir c\ los Vl<fJOS y VlejaS que pasa· ron: caiaa sabre nos el cielo, y desciendan los demanias del airc llamados 'l'=:it:imites, los cualcs han de venir a destruir Ia tierra con todos los que en e lla habitan, y para que sicmprc lmya . tinieblas y oUscuridad en todo el mundo, y en mnguna parto haya habitacion de gente. E "to los vicjos Jo supieron y cllos lo divulgaron, y de boca en bo~a l1a. vcnido hasta n osotros (jUe so ha de cumpl1r en el fin del mundo, dcspucs que ya Ia tierra. est.uviere harta de producir mas criaturas. jSei'ior nuestro,! por riquezas y pasaticmpo tcndrCmos que esto venga sobre los que ccsistimos. jO pobres de nosotros! tuviCradci ya par bien scfior fjUC viniera pcstilcncia, que presto nos acalxua, Ia c ua! plaga suclc vcnir del dios del inficmo. En tal caso, por ventura Ia diosa de los mantcnimicntos, y cl dios de las mieses, hubieran proveido de algun refrigcrio, conque los que murieron lle\rusen alguna moc hila para andar el camino acia cl infieruo: jOjaiCt esta tribulacion fUera de guerra que procedc de Ia impresion tiel sol Ia cua l despierta como fuerte y valerosa en Ia tierra, porque en cste caso tuvieran los soldados y valientcs hombres, fucrtes y bclicosos, gran regocijo y placer por hallarse en ella, puesto que alii mueren muchos y se derrama mucha sangre, se hinche el campo de cuerpos muer~ 1'6m. II. 10 |